Soledad Puértolas, una de las mejores escritoras españolas contemporáneas, configura un personaje masculino que vive a la búsqueda de algo, una meta sin definir.
Mario, el narrador, a las puertas de la madurez, tras muchas experiencias importantes, mira hacia atrás y, en la percepción oscura del mundo, encuentra un halo de luz alrededor de episodios, momentos y personas que se han cruzado con él.
Mario evoca los encuentros con la señora Berg, la madre de su mejor amigo, de la que se enamora en plena adolescencia. Los encuentros de Mario con la señora Berg, la mujer de sus sueños, marcarán la evolución e inquietudes de Mario.
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